Uno de los temas más controversiales cada año y especialmente durante la categoría infantil es el arbitraje, su influencia en el juego y las consecuencias que se generan.Hasta la fecha se critica fuertemente la validez del foro de opinión de Sportsnet (ese tema lo tocaremos después) pero la realidad es que la gente tiene voz y si las ligas estuvieran realmente interesadas en mejorar tendrían que poner atención a lo que se dice que finalmente tiene algo de veracidad.
La gente que participa en el foro trae “de encargo” al señor Francisco Reyes, mejor conocido como “el Vikingo” quien encabeza la planilla arbitral AIFA. Las constantes quejas no deben ser tomadas a la ligera, vaya creo que hasta lo han hecho mas famoso (no creo que eso le moleste mucho). Lo cierto es que podemos enfocarlo como ejemplo de lo que representa el arbitraje para los involucrados (aquí exento a los jugadores que no creo tengan ni un gramo de malicia por si solos).
El Vikingo siempre ha sido una figura controversial. Es un hombre dedicado. Ha puesto mucho tiempo en las reglas NCAA (anda traduciéndolas y hasta publicándolas) y fue de los primeros en poner su dinero en un sitio web. Fríamente no creo que muchos valoren estos esfuerzos. Sin embargo también ha sido criticado fuertemente por las ligas (inclusive hay donde no lo invitan), por sus compañeros oficiales, ex miembros de su planilla y hasta por coaches, jugadores y tribunas.
En lo que va de la corriente temporada ya existen quejas de varias organizaciones de FADEMAC con respecto a AIFA. Lo que se dice es lo de siempre; se meten con los coaches y hasta con los jugadores, varían las reglas con respecto a situaciones definidas (como manipular el reloj de juego dependiendo del marcador), están lejos de las acciones.
Mas allá de con fundamentos o sin ellos, la liga debe lidiar con este monstruo constantemente. Yo no creo que alguien en la actual mesa directiva pueda afirmar que le es intravenoso el tema. Es de los más incómodos siendo que hasta cierto punto dependen de ellos para desarrollar los torneos. Además hay que sumar el hecho de que no hay muchas planillas que digamos… es por esto que las ligas no pueden darse el lujo de “castigar” especialmente durante la infantil y su marabunta de partidos por todos lados.
De acuerdo con varios representantes de organizaciones estas situaciones afectan mucho el accionar de las jornadas. De entrada deben lidiar con las críticas de la tribuna previo a cada juego, para luego tener que controlar la banda durante el evento para que sus expresiones contra las planillas no se reflejen en pañuelos en contra de sus equipos. Y al término del encuentro, si es que se encontraron decisiones controversiales, tienen que aplacar los ánimos antes de que haya broncas mas graves.
Criticar a los oficiales es simple, y si somos honestos muchos escudan sus propias fallas e inclusive su poca preparación y conocimiento del juego diciendo que el Vikingo o cualquier otro oficial “es inepto”. Sin embargo lo que si es una constante es la falta de planeación y de procesos de mejora en este rubro. Las ligas siempre se mantienen al margen y dejan la supuesta capacitación a las mismas planillas. Obviamente esto es un círculo vicioso que no lleva a ningún lado.
El problema es de todos. La solución hasta el momento es de nadie…
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