martes, junio 26, 2007

Méxicanos al grito de la NFL

DISTRITO FEDERAL, Mex (SPNET).- Yo me acuerdo cuando comenzaba la cobertura de Sportsnet del futbol americano de México. Era el año 2000 y en algunos de los primeros encuentros que veíamos, estaban los Borregos CEM que en aquel entonces surgían como una nueva potencia de la Liga Mayor y en aquel equipo tenía entre muchos, un ícono especial que de pronto de había convertido en ídolo para los seguidores del equipo, le decían Tyson.

Proveniente del Estado de México, Mauricio López llegó al CEM para tomar un lugar de honor justo a tiempo para ser una de las piezas claves para aquel primer campeonato que se decidiera de manera espectacular en el Corral de Plástico y de ahí se convirtió en más que un jugador, en todo un símbolo que hoy parece tomar otras alturas.

Ya fuera desde su posición en la línea defensiva o desde el backfield del CEM, el Tyson sorprendía por su gran tamaño pero recuerdo llamaba la atención al tener una estupenda personalidad, siempre sonriendo, disfrutando el juego.

Esa alegría debe sentirse hoy más que nunca. Mauricio junto con Salomón Solano y Eduardo Castañeda reciben en premio más importante a sus esfuerzos en el emparrillado, una invitación a competir por un lugar en el futbol americano de verdad, el que convoca a todo el mundo, a la NFL.

“Cuando llegamos a Europa, no somos nadie en realidad”, me comentó Mauricio hace cerca de un año cuando lo entrevisté previo a su participación en la final nacional de la NFL Tochito. En la comodidad de un cuarto de hotel, el Tyson y Salomón junto con Erick Cantú y César Loredo, nos platicaron de sus experiencias en su primera temporada de la NFL Europa, un logro que de por sí parecía ser suficientemente bueno para los estándares mexicanos.

Contentos en aquel entonces con la posibilidad de jugar en la antesala de la NFL, los jugadores comentaban que de entrada no se la creían y que haberlo logrado era un sueño hecho realidad.

Hoy a un año de distancia, las cosas son aún mejores.

“Me gustaría jugar con los Texanos de Houston, más que nada por todos los mexicanos que viven ahí pero la verdad me gustaría jugar en la defensa de los Cuervos de Baltimore”, comentó Salomón Solano hace un año. Bueno, pues no será ninguno de los dos pero Salomón tendrá su chance en la NFL con los Leones de Detroit, un equipo que está urgido de defensiva y que bien podría invertir en él para el futuro.

Por su parte Houston si invitó a un mexicano a sus filas de pretemporada. El Bibi Castañeda será el segundo apoyador mexicano en la historia del equipo en buscar un lugar en el roster de temporada regular. No hace mucho fue Antonio Rodríguez, también proveniente de los Borregos Monterrey quien lo intentara.

Y finalmente el Tyson se dará sus primeros topes de verdad con las Águilas de Philadelphia, escuadra contendiente que durante los últimos años ha tenido mucho éxito en la liga y que cuenta con fuertes posibilidades de inclusive jugar un Super Tazón.

“Yo no tengo preferencia, no quiero jugar con ningún equipo en particular. Lo que quiero es salir de un túnel y que te ovacionen”, dijo López quien además aseguró que le encantaría que toda la gente se diera cuenta que viene de México.

Mauricio además no se conforma con tener la oportunidad. “Me encantaría jugar la fiesta de los playoffs y de un Super Tazón”, resaltó.

Hoy Tyson, tienes la oportunidad de ser alguien. La posibilidad está ahí para que los tres pongan su nombre entre la elite mundial en el deporte que adoran y porque no pensar que pueden alcanzar el sueño de un campeonato, de los de verdad.

Sin embargo la historia de los invitados a los campamentos de pretemporada de la NFL no es precisamente sencilla para los mexicanos que año tras año han fracasado en el intento. Con una competencia como nunca la han visto, los tres mexicanos vivirán en unas semanas la mejor experiencia de sus vidas y pase lo que pase, ya avanzaron un poco más hacia la meta final.

lunes, junio 25, 2007

Golazo y a llorar, de nuevo

CHICAGO, EU (SPNET).- Por más que lo piensas, no terminas de entender como es que el futbol mexicano no termina por dar los pasos importantes y justo cuando parece que todo está puesto para que así sea, viene un golazo y no queda más que llorar la derrota.

Como ya es costumbre la participación del arquero nacional Oswaldo Sánchez fue de los mejor que mostró el Tri en esta edición 2007 de la Copa de Oro.

Una serie de lances en la primera mitad del encuentro de Oswaldo volvían a mostrar que además de gran talento, el jugador tiene suerte pero el destino de la selección nacional parece siempre estar echado, aún pese a que su portero se presente en plan gigante.

Y es que para vencer a Oswaldo este día, los Estados Unidos y su estrella Landon Donovan tendrían que hacer algo magnífico, lástima que encontraron la manera de hacerlo.

Por un momento recordé el partido de octavos de final de la Copa del Mundo en Alemania 2006 cuando México tuvo que enfrentar a Argentina. Con un motivado Oswaldo Sánchez en la puerta, México y su polémico técnico Ricardo Lavolpe estaban en la antesala de finalmente arribar a cuartos de final pero tal como hoy, un señor gol era la única manera que Argentina vencería a Sánchez. Para desgracia de todos los mexicanos, Maxi Rodríguez se lo encontró y terminó el sueño azteca.

Pues hoy cuando veía a Oswaldo lucir bajo los postes pese a la lógica falta de coordinación entre el recién llegado Rafael Márquez y un titubeante Jonny Magallón, no parecía que hubiera manera de que los norteamericanos pudieran vencerle, pero la historia es caprichosa y se repite consistentemente.

La bolea de Benny Feilhaber queda ahí como el mejor gol de esta Copa de Oro y una vez más Oswaldo fue vencido por un señor tiro ante el cual no se podía hacer nada.

Pese a claramente ser el mejor portero del certamen, el arquero mexicano vuelve a irse a casa con un sentimiento vacío.

“Esto es de errores y aciertos, desafortunadamente nos hacen un golazo y perdemos la Copa Oro, estamos tristes, pero creo que el equipo cayó con la cara en alto", comentó al final del partido que la selección tuvo en sus manos en la primera mitad y que volvió a dejar escapar.

Estos partidos de competencias internacionales ante rivales de jerarquía (como tristemente para México, es ahora Estados Unidos) se deben ganar con carácter, especialmente con mentalidad, algo en lo que hoy el rival nos volvió a dar cátedra, aunque duela.

La evolución del futbol norteamericano por eso es peligrosa y penosa para México. Pese a tener un tipo de juego inferior técnicamente, los rivales del norte tienen justo lo que hace que los equipos sean grandes, la visión y la confianza de que el trabajo realizado será recompensado durante los 90 minutos del partido y así juegan, libres y son pacientes para que finalmente las cosas se tornen a su lado.

Hoy perdían por un gol, ante un estadio en Chicago que lucía más mexicano que muchos de la República, y tenían enfrente a un arquero que venía en su día. Aún así, ellos se llevaron el triunfo.

Hoy no fue Hugo Sánchez como técnico, no fue Temoc haciendo de las suyas, no fue ni siquiera el árbitro a quien muchos culparon. Hoy fue la mentalidad ganadora del rival la que volvió a la diferencia en un juego cerrado y que se decidiría así, por errores o por grandes aciertos.

Oswaldo recibió dos goles, no tenía nada que hacer ante ellos. No por eso se quedó callado al ver como un día de grandes aciertos bajo su marco se convirtió en una dolorosa derrota.

“Creo que es muy fácil llorar y quejarte del arbitraje. Soy un jugador que quiere ganar y que defiende a su país, me tocó perder y duele".

Solo le faltó decir, una vez más.

miércoles, junio 20, 2007

Duro y a la cabeza contra las contusiones

ROSEMONT, EU, Jun 19 (JULIO PEÑA-SPNET).- Una vez que el tema de los jugadores problemáticos está más o menos controlado, ahora el Comisionado de la NFL se enfrentará al de los problemas médicos, especialmente de las contusiones.

Roger Goodell quien tomara el cargo al frente de la liga hace poco menos de un año ha demostrado una gran voluntad de resolver los pequeños, grandes problemas que desde hace años son los que dañan la imagen de la liga y de cierto modo el espectáculo mismo.

Durante su conferencia de prensa previa al Super Tazón XLI en Miami, Goodell tuvo que enfrentar varios cuestionamientos, y debemos aceptar que ha hecho su parte, y paso a paso ha estado atacando cada uno de ellos.

Hace apenas unas semanas el Comisionado comenzó y finalizó con el tema de los jugadores que se han encargado de estar en la prensa pero por sus problemas con le ley, más que por sus actuaciones en el emparrillado. Hoy el sentimiento alrededor de la liga es bueno. El mensaje es claro, no hay tolerancia para los miembros que no mantengan una imagen apropiada no solo durante la temporada sino a través de sus vidas diarias.

Ahora es turno de enfocarse en otras cosas y porque no retomar el tema médico que ha venido afectando a jugadores tanto activos como retirados.

Fue el ex apoyador de los Patriotas de Nueva Inglaterra Ted Johnson quien destapó el tema de manera agresiva al declarar para un periódico norteamericano que durante la temporada 2002 tuvo que participar en entrenamientos y juegos pese a haber sufrido contusiones consecutivas. Ahora el ex jugador acusa esta presión como principal causa de sus inicios de Alzheimer, tan solo uno de cientos de casos de ex jugadores que tras terminar sus brillantes carreras en el terreno de juego, deben “pagar el precio” al vivir de manera muy mala con problemas de salud que para muchos terminan en muertes prematuras.

La lista de jugadores que sufrieron de golpes a la cabeza durante sus carreras en la NFL es interminable. Los mariscales de campo hoy miembros del Salón de la Fama, Steve Young y Troy Aikman, dos grandes estrellas en sus tiempos tuvieron que decidir entre arriesgar sus vidas y seguir jugando futbol americano, creo que ninguno de nosotros se extraña de que hayan determinado comenzar una carrera como comentaristas en la televisión.

Con tantos ex jugadores lastimados de porvida y con tantas muestras de que este violento deporte si puede limitar la vida futura de sus participantes, era una obligación que la liga comenzara un nuevo camino, uno que por lo menos acotara los temas más elementales de seguridad.

Si Johnson sufría de una lesión tan seria que debía impedirle jugar al cien por ciento, es verdaderamente increíble pensar que el coach Bill Belichick le exigiera que participara y que finalmente él mismo aceptara hacerlo. La responsabilidad de estos riesgos cae sobre todos, empezando por el Comisionado.

Las medidas tomadas son interesantes empezando por el simple y llano hecho de que nadie que se sienta mal debe participar. Ahora los jugadores tendrán un sistema que permitirá dar a conocer que están siendo presionados por médicos o por coaches.

Aunque esto parece sentido común, es la base esencial no para que estas lesiones desaparezcan sino para que los efectos de ellas no sean tan graves, por lo menos por agravarlas con más golpes.

La naturaleza del juego jamás permitirá que estas lesiones no existan. Ni la mejor utilería puede contener la violencia de un golpe, incluyendo muchos que la verdad se dan “sin querer, queriendo”. Son los mariscales de campo los que regularmente se llevan la peor parte pero todos los jugadores en el campo están expuestos a recibirlos en vez de darlos. Ahí está el caso del apoyador de los mismos Patriotas Teddy Bruschi quien tuvo que dejar de jugar por un tiempo para recuperarse de un problema de este tipo, no sin antes llevarse el susto de la vida al saber que su vida estaba en juego.

Una vez que el jugador tiene digamos, la desgracia de sufrir una contusión, no hay más que hacer. Como decimos en México, “se borra el casete” y no queda más que tomar las cosas con calma, pegarse al médico, hacerse los estudios necesarios y esperar la recuperación que de no llegar atenta contra el sueño de jugar pero además contra la economía familiar del jugador y los resultados de todo el equipo y finalmente la liga.

En una de las mejores declaraciones que el Comisionado Goodell ha hecho de su llegada, asegura que la decisiones médicas matan todos los argumentos deportivos.

Eso es algo difícil de aceptar si eres el dueño del equipo, el coach y hasta el fanático. Pero ¿qué diría la familia del jugador?, ¿qué opinarían ustedes si el lesionado fuera su hijo?

domingo, junio 10, 2007

Que razón tenías Lavolpe


NUEVA YORK, EU, Jun 10 (SPNET).- Cuando vemos lo que pasó hoy por la tarde en la derrota del equipo mexicano ante el seleccionado de Honduras comienzas a entender algunas cosas, no puedes dejar de pensarlo.

Por enésima ocasión, el delantero mexicano Cuauhtémoc Blanco hizo de las suyas. Dejó solo a su equipo, desniveló un partido que estaba bien controlado y le complicó la vida a sus compañeros y al técnico Hugo Sánchez quienes tienen que enfrentar las críticas de la prensa nacional.

Pero es ahora cuando puedes reflexionar de los actos pasados. Recuerdo hace poco más de un año que el tema de moda en México era que el seleccionador nacional Ricardo Antonio Lavolpe no había convocado al Mundial de Alemania 2006 a un ícono del futbol mexicano, al que para muchos era el mejor delantero del país, a Cuauhtémoc Blanco.

Como ya era costumbre ante la presión de los medios nacionales, Lavolpe sencillamente se tomó la pastilla de paciencia para dar a conocer que Blanco no asistiría a la justa mundialista y aceptó todas las críticas, todas las dudas, todo lo que le tiraron encima.

Al final de la historia, Lavolpe tuvo una actuación digamos decorosa en el Mundial y Blanco vio todo desde su casa en México.

Pero hoy cuando vi al famoso Temo tirarle un codazo a un defensa de la inferior pero bien motivada selección hondureña, digamos que me cayó el veinte de porque Lavolpe prefirió llevarse la rechifla previo al inicio del Mundial a tener que lidiar con las actitudes y los modales de Temo que hoy es identificado a nivel mundial como un jugador con talento pero por demás conflictivo y hasta destructivo.

Blanco fue el primero en salir del vestidor de México tras la derrota y de inmediato comentó que se siente apenado con sus compañeros, “me enganché con ese pobre tontito que ni sabe jugar futbol”, dijo.

Que bueno que Cuauhtémoc si sabe jugar aunque antes de expresarse de esa por demás deplorable manera debería pensar que a eso lo llevaron a la Copa de Oro, a jugar, no a mostrar que sigue siendo un jugador desequilibrado y que piensa que puede salirse con la suya con antifutbol.

El “tontito” se llama Jorge Samuel Caballeros y hoy está celebrando un triunfo que para Honduras es como haber ganado la Copa. Blanco aseguró que fue el jugador quien lo estuvo provocando todo el partido, que incluso le escupió.

Señor Blanco, que buena justificación.

De todos es sabido que Honduras y el resto de las selecciones centroamericanas salen a jugarle a México usando todo tipo de herramientas, incluyendo los golpes y las provocaciones. Hugo Sánchez conoce bien todo eso y por eso convocó a jugadores de experiencia, que pueden enfriar cabezas justo cuando más se necesita. En papel el Temo era uno de esos.

Para rematar, Blanco aseguró que se puede esperar cualquier cosa al pensar en la sanción que le darán. “El torneo está muy mal organizado”, agregó.

Lavolpe, que razón tuviste hace un año. Es muy probable que Blanco fuera un buen elemento para la selección en Alemania, pero a nadie habría asustado verlo mostrando el código postal y despotricar contra el torneo mismo. Por lo menos hoy, solo lo vio la CONCACAF.

Ustedes, ¿cómo si lo vieron?