TORONTO, Can, Dic 21 (SPNET).- Todas las historias tienen su final y este jueves por la noche se podría terminar uno de los amores más grandes de los últimos años en la NFL.
El romanticismo que vivió la ciudad de Green Bay con el mariscal de campo Brett Favre podría llegar a su fin cuando los Empacadores de Green Bay tengan su último partido en casa en la temporada regular 2006 recibiendo la visita de los Vikingos de Minnesota en acciones de la jornada 16.
Y es que los seguidores de los Packers vienen escuchando del posible retiro del que junto con Bart Starr ha sido el mejor mariscal de campo que ha tenido la franquicia y finalmente el momento de despedirse podría ser esta noche.
Fue hace un año, al término de la temporada regular del 2005 que Favre anunció que no decidiría su futuro sino hasta previo al inicio de la actual campaña. Entonces dio a conocer que si regresaría por un año más siendo que el equipo tenía el talento para pensar en la postemporada, algo que claramente fue demasiado aventurado.
A meses del inicio de la temporada, los Empacadores marchan con un record de seis ganados y ocho perdidos y aunque siguen vivos matemáticamente, la posibilidad de que se gane un lugar en la postemporada es lejana.
Es así que Favre volverá a encontrarse con la triste realidad, enfrentar al fantasma del retiro tras un año con record negativo y aunque el equipo mostró mejoras con respecto al año pasado, todavía está lejos de poder ser contendiente.
Los aficionados todavía tienen grandes razones para salir al frío del Lambeau Field a vitorear a Favre.
Hace unos días logró romper la marca de más pases completos de la NFL con 4,968 (previamente poseída por Dan Marino) y ese número seguirá creciendo por lo menos ante los Vikingos y cuando los Packers visiten a los Osos de Chicago en el cierre de la temporada regular el 31 de diciembre.
Dueño de grandes números, del corazón de los aficionados de Green Bay y del respeto de todos los seguidores de la NFL, Brett Favre saltará a la cancha buscando hacer lo que hemos visto en las últimas semanas, divertirse.
Sin embargo habrá un momento especial, tal vez no lo notemos en la televisión pero seguramente tendrá que derramar una lágrima y luego tendrá que pensar si su cuerpo todavía puede resistir otra temporada más.
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